No todos los nutrientes son beneficiosos para nuestra salud, ni muchísimo menos; de hecho hay algunos que nos pueden perjudicar considerablemente o hacer engordar, por lo que se recomienda evitar su uso habitual.
A continuación os voy a listar 4 componentes de los que se recomienda prescindir para una mejor alimentación, y por ende, una mejor salud
1. HIDRATOS DE FÁCIL ABSORCIÓN (solamente los adictivos y poco saciantes)
Así como hay carbohidratos (fuente de energía esencial para nuestro desarrollo) que son poco saciantes, de fácil asimilación y que aumentan los picos de glucosa en sangre (que favorecen la acumulación de grasa), como los azúcares libres o las harinas refinadas, también hay fuentes excelentes de hidratos como las legumbres, frutas y verduras frescas, etc.
Estos azúcares promueven una conducta adictiva, es decir, su consumo habitual nos incita a comer más, favoreciendo así el balance energético positivo que nos conduce a engordar.
2. GRASAS TRANS
Al igual que con los hidratos de carbono, para las grasas también encontramos opciones saludables y perjudiciales. Las beneficiosas pueden ser muy útiles para adelgazar y son las conocidas como insaturadas.
Sin embargo, están las que ocasionan el efecto contrario sobre el peso y grasa corporal, las llamadas grasas trans. Estas se encuentran principalmente en alimentos ultraprocesados y a parte de elevar factores de riesgo cardiovascular, son las responsables de la acumulación de grasa abdominal, promoviendo el aumento de peso y enfermedades como la obesidad.
3. SODIO (No engorda pero empuja a comer más)
Un claro ejemplo de que las calorías no lo son todo a la hora de engordar es el sodio, que no ofrece energía al cuerpo pero sí resulta un componente adictivo de nuestra dieta y puede incitarnos a comer más.
Como ya sabéis, el sodio forma parte de la sal, y todo aquello que lo contenga (siendo abundante en productos industrializados), puede promover el ingreso de calorías en nuestro cuerpo y así incrementar nuestra grasa y peso corporal.
Para no perjudicar nuestra salud, es recomendable reducirlo e incluso eliminarlo, remplazándolo por hierbas o especias o elaborando aliños caseros, para poder controlar la cantidad que ingerimos, intentando no superar los 2 gramos diarias como recomienda la OMS.
4. ALCOHOL: un componente con calorías vacías
El alcohol que nosotros consumimos de vez en cuando en bebidas (etanol) no es en sí un nutriente, pero constituye un componente nutritivo puesto que aporta calorías al organismo. Las calorías que ofrece son vacías, sin nutrientes de calidad, que incluso en su menor dosis pueden ser nocivos para salud.
El alcohol se suele utilizar como combustible para el cuerpo, favoreciendo el almacenamiento de grasas en el organismo, favoreciendo engordar.
Este tipo de sustancias suelen incrementar nuestro apetito y las ganas de comer, además de reducir la saciedad, ya que produce una alteración de hormonas involucradas en este proceso.
Por estos motivos, los cuatro nutrientes previamente nombrados al poder hacerte engordar, se recomienda evitarlos en la dieta habitual (si deseas cuidar la línea y proteger la salud).
En Portugal se decreta la prohibición de la publicidad de galletas, batidos de chocolate y la mayoría de cereales y yogures a menores de 16 años con el propósito de reducir la ingesta de azúcares.
Esta será efectiva a partir de octubre, dejando de publicarse en pantallas, redes sociales, radio y televisión.
El objetivo es reducir la ingesta de sal, azúcar y grasas saturadas que provocan enfermedades.
El estudio de la DGS confirma que solo podrán publicitarse «el 17 % de los refrigerantes , 28 % de los yogures, 21 % de los quesos y el 10 % de los cereales de desayuno».
Para realizar esta prohibición la autoridad sanitaria de Portugal se ha inspirado en las recomendaciones de la OMS.
En la actualidad, el smoothie se ha convertido en una de las bebidas de moda. Básicamente, consiste en un batido de frutas que se toma entre horas e incluso como substitutivo de comidas. Alrededor de este han surgido dudas de si es un producto beneficioso o no, por ese motivo vamos a nombrar sus pros y contras:
Como aspectos positivos podemos decir que los smoothies son nutritivos y fáciles de digerir. También son gran fuente de antioxidantes y mejoran nuestra digestión. Por último, estos previenen contra enfermedades como el cáncer y desintoxican nuestro cuerpo. Además, supone un refuerzo de vitaminas.
Por otra parte, este producto también presenta una serie de aspectos negativos. En primer lugar, este batido puede convertirse en un producto con un alto contenido en azúcares por su gran número en frutas. Estos son bajos en proteínas y fibra, por eso se recomienda añadirle a los batidos unas verduras. Por último, este producirá en el cuerpo una aumento de la glucosa en sangre muy rápido y al poco tiempo un bajón de azúcar. Además, de ser indigestos si se abusa de los cítricos durante la mañana.
¿Tienes que comer en la uni y no sabes qué llevarte?
Hoy te voy a dar dos ideas (no muy complicadas) para que cuidar tu bolsillo y no comprarte todos los días la comida en el bar.
Llevándote una fiambrera preparada en casa no solo vas a ahorrar ( y poder comprarte ese capricho que llevas aplazando tanto tiempo), sino que además comerás más sano y es que, realmente, ¿qué hay mejor que saborear algo cocinado por ti?
Estas recetas son con dos alimentos que están de temporada en noviembre: la calabaza y las setas.
La calabaza (que en verdad es una fruta y no una verdura), es muy versátil: se puede usar tanto para repostería como para platos salados. Está repleta de nutrientes como el magnesio (importante para el sistema cardiovascular y nervioso), betacarotenos, antioxidantes y mucha fibra (1,5 g por cada 100 g de calabaza). Por si fuera poco, no aporta apenas calorías: 26 kCal/100 g y ¡ESTÁ DE TEMPORADA!
Las setas son bajas en grasa, contienen un alto contenido proteico, aportan fibra, antioxidantes y al ser ricas en agua, aseguran una correcta hidratación de la piel.
Estos dos productos casan muy bien, sus sabores se complementan perfectamente, por lo que en ambas recetas haremos uso de los dos ingredientes.
La primera idea es un risotto integral de setas y calabaza. Este plato, a parte de ser sabrosísimo, es muuuy saludable.
INGREDIENTES para 2 raciones (así te sobra para otro día 😉 :
140 g de arroz integral
400 g de calabaza
1 cebolla
250 g de setas
2 dientes de ajo
400 ml de caldo de verduras
Queso parmesano
AOVE, sal y pimienta (al gusto)
Cebollino para decorar (opcional)
ELABORACIÓN:
Pelamos y picamos finos el ajo y la cebolla
Rehogamos en una sartén con un poco de AOVE el ajo y la cebolla
Cortamos en daditos la calabaza
Añadimos la calabaza a la sartén (si vemos que se está dorando demasiado el ajo, añadir un chorrito de caldo de verduras para que no se queme)
Salpimentar al gusto
Hervimos el arroz, según lo indicado en su envase, en el caldo de verduras
Mezclamos el arroz con el resto de ingredientes en la sartén
Rallamos queso parmesano al gusto, mezclamos y corregimos sal y pimienta, si es necesario
Servimos en la fiambrera (HERMÉTICA), rallamos un poco más de queso y añadimos cebollino picado.
La segunda receta que os comparto se trata de una crema de calabaza y champiñones:
INGREDIENTES para 2 raciones:
70 g de cebolla
200 g de calabaza
160 g de patata
1/4 de cucharadita de comino
150 ml de agua
80 ml de leche / bebida de soja sin azúcar
150 g de champiñones
10 ml de AOVE
5 ml de salsa de soja
Sal al gusto
Pimienta al gusto
ELABORACIÓN:
Calentamos el aceite en un cazo a fuego medio. Una vez caliente añadimos la cebolla cortada en cubitos y cocinamos 2-3 minutos hasta que empiece a dorarse. Añadimos la calabaza (pelada si hace falta) cortada en cubitos pequeños junto con el comino y cocinamos 2 minutos más.
Incorporamos las patatas (peladas y lavadas) cortadas en cubitos pequeños. Cocinamos removiendo muy bien durante 1 minuto.
Añadimos el agua junto con 50 ml de leche y una vez que hierva tapamos y cocinamos a fuego medio 15-20 minutos (hasta que estén todas las verduras bien cocinadas)
Trituramos hasta conseguir una crema suave y un poco espesa.
Añadimos poco a poco la leche que nos queda hasta conseguir la textura que más nos guste. Salpimentamos al gusto y ya teneos al crema lista.
En una sartén con un poco de aceite salteamos los champiñones cortados en trozos grandes 2-3 minutos.
Añadimos la salsa de soja y cocinamos 1 minuto más.
Colocamos los champiñones encima de la crema para decorarla.
*Puedes decorar con unas semillas de sésamo tostado, así aportas un extra de sabor.
Con estas recetas, comer en la uni ya no va a significar hacerse todos los días el mismo bocata.
by dgiltor on 28 de octubre de 2020 at 20:58 · Filed under Sin categoría and tagged: gastronomía, healthy
¿Cuántas veces hemos llegado a casa tras un largo día de trabajo o estudio?
Todos hemos tenido días en los que hubiéramos deseado ser millonarios para que nos cocinaran a nosotros sin tener que movernos del sofá o de la cama.
Varios chefs españoles nos cuentan varias de sus recetas para aquellos días en los que la pereza se apodera de nosotros.
Estas recetas se basan en un menor uso de grasas:
Ensalada de remolacha (Jorge Bretón):
Mezclamos una remolacha, un tomate, una endivia y una lata de ventresca de atún
Aliñamos con una vinagreta con queso batido, aceite de oliva virgen extra y un poco de vinagre de Jerez.
Imagen extraída de saborgurmet.com
Salteado de verduras (Jorge Bretón):
Con brotes de soja, salsa de ostras, chiles, hierbas trituradas y tomate, elaboramos una salsa tipo asiática.
Esta salsa la metemos en la cubitera y al congelador.
Salteamos un diente de ajo con un poco de perejil, una cebolla, verduras varias y una pechuga de pollo. También introducimos algún cubito de salsa en el salteado.
Imagen extraída de dietfarma.com
Tartar de atún con guacamole (Fernando Carrasco y Julián Barros):
Cortamos 1 kg atún en dados de un centímetro y picamos 200 g de cebolla roja en brunoise.
Mezclamos 500 ml de salsa Perrins con 500 ml de salsa de soja, jugo de almejas y tomate y 10 g de pasta de chile chipotle en adobo.
Juntamos ambas elaboraciones.
Elaboramos guacamole machacando 500 g de aguacate junto con 50 g de jalapeño fresco, 10 g de cilantro picado y 20 ml de zumo de lima hasta que quede cremoso y con sal al gusto.
Imagen extraída de TripAdvisor
Revuelto de bacalao (Miguel Carretero):
Ponemos aceite de oliva y medio ajo picado a fuego medio-bajo. Cuando esté medio dorado añadimos los 100 g de bacalao desmigado.
Rehogamos un puñado de espinacas frescas.
Añadimos 2 huevos batidos y sal al gusto.
Acabamos el plato con una pizca de piñones tostados
Imagen extraída de sabervivirtv.com
Ahora podemos decir que, el que no quiere cenar de una forma sana, nutritiva y relativamente rápida es porque no quiere.