Desde hace algunos años y debido quizás al reconocimiento a nivel general del papel de la alimentación en nuestra salud, se inició una búsqueda, en la mayoría de los casos con gran rigurosidad científica, sobre los alimentos y su efecto sobre la salud.
Esta búsqueda va desde alimentos saludables, menos procesados y aspecto de calidad. Estos pueden ser alimentos frescos o mínimamente procesados, platos preparados o precocinados…
Es por esto que se han desarrollado tecnologías enfocadas hacia el mantenimiento y conservación de alimentos, teniendo como objetivo la búsqueda de tratamientos térmicos alternativos y el desarrollo de tratamientos no térmicos de conservación, para producir así alimentos más sanos y con mayor vida útil ofreciendo alimentos con el mínimo procesamiento. Los tratamientos se basan en pulsos eléctricos exponiendo al alimento a un campo eléctrico logrando la muerte de los microorganismos, altas presiones produciendo efectos de esterilización…
Otras tecnologías usadas en la conservación de alimentos son la irradiación, ideal para alimentos sólidos o incluso congelados, los pulsos de luz que son destellos de luz de gran intensidad y corta duración que eliminan microbios.
Estas tecnologías nos ayudarán a mejorar la calidad de alimentos generados el día de mañana.
Bibliografía:
https://www.analesdenutricion.org.ve/ediciones/2007/2/art-8/