Blog Alimentación y Cultura (2020-21) A1

Blog creado por los alumnos del Grado en Ciencia y Tecnología de los Alimentos de la UPV

Archive for noviembre 19, 2020

Algas ¿alimento saludable?

En los últimos años hemos visto una gran aumento en el consumo de algas globalmente, principalmente como consecuencia de la expansión de la cocina y cultura japonesa en occidente. Por lo general, los alimentos exóticos suelen atraer mucho al consumidor, pero sí además le atrubuimos propiedades saludables, tenemos un combo perfecto en el mercado. Y es que las algas son un alimento que nutricionalmente pueden parecer muy sano, al fin y al cabo, están constituidas en un 90% por proteínas, su porcentaje graso es prácticamente insignificante, y además de vitaminas (A, D, E, B1, B2, C) y minerales (calcio, fósforo, potasio, hierro, yodo, sodio), en su composición también podemos encontrar, agar y carragenatos (dos tipos de fibras que no se digieren) con efecto saciante.

Sin embargo, este «superalimento» esconde un secreto, que deberíamos tener muy en cuenta en el fúturo. Ya que las algas no sólo tienen tendencia a acumular metales pesados (sobre todo la especie hijiki o hiziki), sino que además tienen un gran contenido en yodo, un mineral que en grandes cantidades se asocia con problemas en la síntesis de la hormona tiroidea (reguladora de la tiroides). Y es que un sólo gramo de algunas de las especies más consumidas como kombu, nori o wakame aporta cinco veces o más el límite recomendado por la OMS (Organización Mundial de la Salud).

En definitiva, la recomendación a la hora de comer algas es evitar su consumo habitual, tomándolas en pequeñas cantidades, utilizando el alga como un ingrediente más, y no como el principal de nuestro plato.

Ahora teniendo en cuenta lo explicado anteriormente me gustaría que comentaraís si este producto de Mercadona con un 24% de extracto de alga nori, debería comercializarse sin advertir de sus posibles problemas:

Bibliografía:

Aumento de intoxicaciones por setas

Estas últimas semanas se han registrado un aumento en la recogida de setas en el país, a causa de la situación actual las salidas al campo se han vuelto más frecuentes. El principal problema de la recolección de dichos productos es hacerlo sin ningún conocimiento previo, ya que esto puede dar lugar a una serie de intoxicaciones graves como las ocurridas los últimos días en la Comunidad de Navarra.

Luis Miguel García, presidente de la Sociedad de Ciencias Naturales de Navarra Gorosti, señala que dichas intoxicaciones han sufrido un amplio aumento este último año, la mayoría leves, pero algunas mortales, tristemente cada vez con más frecuencia. Tenemos que ser conscientes de la difícil situación por la que estamos pasando, y ser lo suficientemente responsables como para evitar ocupar las camas de urgencias en los hospitales, ya que no es el momento idóneo. ¡Dejemos la recolección de setas para los expertos en este campo!

Un consejo clave para prevenir casos graves o incluso mortales, es guardar algún ejemplar de las setas consumidas, ya que a la hora de identificarlas la solución será más rápida y eficaz; además de poder aplicar el tratamiento adecuado de forma inmediata. El tiempo es vital para este tipo de urgencias donde se ven envueltas setas mortales como la Amanita phalloides.

Bibliografía:

https://cadenaser.com/emisora/2020/11/20/radio_pamplona/1605868532_713318.html

Demasiado bonito para ser verdad…

El lenguaje secreto de las estadísticas, tan atrayente para una cultura que se basa en los hechos, se emplea muchas veces para causar sensación, deformar, confundir y simplificar en demasía.

DARRELL HUFF

Una copa de vino equivale a una hora de ejercicio.

La gente que bebe una copa de vino al día tiene menos problemas cardiovasculares.

Comer queso a mansalva guarda relación alguna con el hecho de morir enredado entre las sábanas.

Un mayor consumo de chocolate se asocia con menores niveles de grasa corporal en los adolescentes.

Comer tres porciones de nueces a la semana puede disminuir la mortalidad en un 39%.

Los frutos secos engordan.

¿Cuántas de estas creencias son ciertas? ¡NINGUNA de estas afirmaciones son ciertas!

Debemos saber diferenciar a los buenos estudios científicos de los estudios financiados por la industria, estudios realizados con ratones que extrapolan sus resultados en humanos y resultados estadísticos promedios.


Una buena pista para diferenciar los buenos estudios científicos de los que nos podrían confundir consiste en poner en duda aquellas conclusiones que resultan demasiado bonitas para ser ciertas.


Sigue esta noticia más de cerca en El País con Antonio Ortí.